En los últimos años, las novelas Blue Jeans se están definiendo por un toque oscuro y por estar llenas de crímenes sin resolver. Gran parte de culpa la tiene el joven Chopin que nos sorprendió el pasado año y regresa en una segunda parte bajo el título “La Última Melodía de Chopin”.
Nuevamente, el libro destaca por tener un brillante personaje principal: Sevilla. La ciudad es testigo de una serie de crímenes perfectamente enlazados que desembocan en un sorprendente final. Además, el testigo viaja hasta la ciudad andaluza y a través de las líneas de Blue Jeans es capaz de detectar su belleza.
Por otro lado, a pesar de sobrepasar las 500 páginas, el autor carga de dinamismo sus líneas y se escapa en un auténtico suspiro entre las manos del lector. Sin duda, esto se debe a su gran capacidad para crear tensión entre los personajes más queridos y el fiel reflejo de las preocupaciones de los más jóvenes.
En cuanto a la trama, es sorprendente ser testigo de una gran cantidad inicial de piezas de un puzle que encajan a la perfección en el momento justo y necesario.
