El pasado mes de septiembre, Netflix apostaba de nuevo por una película española. Protagonizada por Mario Casas y Déborah François, recibe el nombre de “El Practicante”. En rasgos generales, el film me ha dejado bastante fría.
El principal elemento que me ha desconcertado es el abundante uso del silencio. En un comienzo, te crea una cierta ansia por saber donde va a ir a parar esa tensión, pero, a mitad de la película, te das cuenta de la existencia de un tremendo vacío en el guion. A pesar de ello, la música es un fiel elemento para cubrir ese fleco suelto.



¿Qué decir del argumento? Considero que estamos demasiado acostumbrados a la presencia de psicópatas y que incluso en muchos momentos la realidad supere a la ficción. A pesar de ello, la angustia es muy potente y puede llegar a cerrarte el estómago, empatizas con la secuestrada, Vane, a la que se le suma el tópico del embarazo.
El mérito principal de esta película, sin lugar a duda se lo llevan los actores. Un maravilloso Mario Casas, que absorbe a la perfección el papel de malo de la película, lleva a cabo un trabajo muy dificultoso, pues incluso el lenguaje no verbal está bordado. Por su parte François no se ve limitada por la invalidez de las piernas del personaje, teniendo un gran trabajo físico detrás de la película.
El reducido uso de espacios y los colores oscuros, con una alta dosis de grabación nocturna, son los barrotes ideales para la cárcel improvisada formada en la casa del protagonista. Ayudan a crear más misterio.



El final es lo que más desconcertada me tiene y al que no le encuentro ningún tipo de explicación. Parece ser que la mejor forma de describirlo es con un chascarrillo de mi madre: dos que duermen en el mismo colchón se vuelven de la misma condición. No se si es una forma muy correcta de terminar una película que tiene como tema principal la violencia de género. La víctima tras haber vivido una situación muy traumática decide enlazarse de por vida a su agresor. Cuando lo único que merecen las mujeres en estas condiciones es ser libre.
Si has visto la película, te agradecería que me contases tu opinión en la sección de comentarios.