Cuando una serie se afianza, semana tras semana, con uñas y dientes al top de productos audiovisuales más vistos de Netflix, es sinónimo de calidad. Este es el caso de “Sagrada Familia” con un reparto de lujo entre el que se encuentra Álex García, Najwa Nimri, Alba Flores, Macarena Gómez o Álvaro Rico.
Hablar de la sinopsis de esta serie es realmente complicado, puesto que un halo de misterio se apodera del espectador pese a que este no sepa, hasta bien adentrada la serie, que ocurre realmente. Gloria (Nimri) se muda a Fuente del Berro acompañada por su misteriosa familia. Allí conocerá a tres mujeres unidas por la maternidad.
En primer lugar, quiero destacar las impecables y empoderadas actuaciones de las mujeres de la serie. Tanto Najwa Nimri, como Alba Flores, Macarena Gómez y Ella Kweku representan diferentes tipos de feminidad, reales y actuales pese a que la serie esté ambientada en décadas pasadas. Todo ello, desemboca a interesantes reflexiones sobre la maternidad.
Además, la estética de comienzo de los 2000 está francamente trabajada, no solo por aspectos estéticos de las ubicaciones y del vestuario, sino también por los constantes guiños a grandes hitos del cine como “Tesis”.
El corazón de esta serie es en trasladar al espectador los diversos interrogantes que se plantean episodio tras episodio, mientras que este juega a intentar ser detective. Aunque, llegar a resolver todos los interrogantes es realmente complicado, puesto que hay una serie de giros de guion estremecedores con los que son imposible reprimir las ganas de chillar.
Considero que es una de las series más importantes del año.