La fiesta es un castillo construido con temazos que levantan el alma y los pies del suelo. Estas canciones son capaces de provocar que 8.000 personas remen en la misma dirección mientras reivindican entre acordes sus derechos.
Ladilla Rusa y sus temas más reconocidos fueron culpables de ello en el escenario de las Reinas durante la primera noche del Orgullo LGTBIQ+ de Madrid.
Los asistentes rompieron en aplausos desde el primer segundo con «Macaulay Culkin». Para posteriormente derivar en la siempre rompedora y divertida «Princesas».


Tras ello, los artistas apostaron por la valentía reconociendo el playback por afonía de su vocalista, Tania Lozano. Y claro está, que quien no apuesta no gana, pues con este simple pero arriesgado acto crearon una gran complicidad con los presentes.
Ladilla Rusa fueron el punto reivindicativo de la noche, con fiesta y reflexión de la mano de temas como «¡Qué ladilla!», que invitó a la meditación previa a la próxima cita con las urnas y «Todos los días lo mismo» que denunció la monotonía
Como no podía ser de otra forma, la traca de fin de fiestas fue «KITT y los coches del pasado». Sin duda, fue una auténtica locura vivirlo en directo.