Barcelona acogió la pasada noche del 18 de noviembre, la segunda edición de la gala People in red, presentada por Jesús Vázquez y destinada a la lucha contra el Sida, en la que nos celebraron con múltiples actuaciones.
La gala, comenzó con la orquesta Dream Bit como maestros de ceremonias, que iban a poner la gota de ritmo ideal para el comienzo y durante toda la noche
La elegancia bajó las escaleras… ¿un ángel? No, es Alba Reche, que instauró un ambiente de calma y serenidad sobre las tablas para presentarnos «Quimera» la canción que da título a su álbum debut.
Sentado al piano, una de sus almas letales para robar corazones, Alfred García nos regaló una de sus nuevas canciones, «Amar al invierno». Derroche de talento, de magia y un punto de epicidad que siempre hace que prometamos quedarnos junto a él.
Lorena Gómez, tras ser presentada con todo el cariño de Jesús Vázquez homenajeó a Freddie Mercury con Show Must Go On, con unos agudos increíbles y un poderío envidiable.
La siguiente actuación destacada fue la de mi ojito derecho, Miriam Rodríguez. Acompañada por su fiel compañera de batallas, la guitarra, puso como siempre todo su corazón en las notas que salieron por su vida, y como ya es costumbre, enmudeció a todo aquel que prestó atención, pues «La Diferencia» Y «Conmigo suficiente» fueron las culpables.
Muy poco acostumbrados estamos a ver a Ana Guerra al piano, y ojalá esto se repitiera más a menudo. Parece que fue la gala de las canciones sobrecogedoras, y la artista se sumó a ello con «Despierta», un tema más que especial para los fans de OT 2017.
El piano, por supuesto, llamó a su maestro para jugar con él en «su patio», sí hablo de Pablo López. Jugar a tocar el cielo, y que se haga realidad, porque así es Pablo, un cumplidor de sueños.
Recién llegada de los Latin Grammy’s, Aitana hizo las delicias de los asistentes y de los telespectadores, con dos canciones muy diferentes, «Nada sale mal» y «Vas a quedarte» dejándonos claro que la artista crece a pasos agigantados.
De nuevo, Lorena Gómez volvió al escenario para seducirnos con «Land of 1000 dances» una de sus actuaciones más memorables de su carrera y broche final a la noche.
Una gala a nivel musical espectacular que reunió a lo mejor del panorama, pero carente de ese «noseque» que te hace no despegar ojo de la televisión. Sin duda disfrutamos más de ella los que la vimos desde el otro lado del televisor, restando espectacularidad al directo.