‘Inés del alma mía’, la adaptación televisiva de la novela de Isabel Allende con el mismo hombre, apuesta fuerte y convence. Una miniserie ideal para el público español, que combina lo que más se ha consumido en los televisores del país: los dramas históricos y el romance. Si a esto le añadimos la investigación que lleva detrás y su verosimilitud, conseguimos una serie perfecta para las noches españolas. La serie se podrá ver cada miércoles en TVE, pero también está disponible completamente en Amazon Prime Video.
Elena Rivera destaca en una sorprendente actuación
Elena Rivera, en el papel de Inés Suárez, se come la pantalla. Le gusta estar en el centro y gusta verla, ya que marca el ritmo completamente de la serie. Sus gestos y miradas transmiten todos los sentimientos al espectador, quien siente que a la vez que ve la serie puede también leer el libro, la descripción de lo que pasa por su mente en cada momento.
Con el resto de personajes ocurre, en su mayoría, lo mismo. Consigues empatizar con varios, aún sabiendo que representan a personajes que existieron, y logran dar ritmo a la serie, evitando las escenas aburridas.
¿Se aprende historia?
Bueno, sí y no. Obviamente es imposible hacer un relato o programa 100% histórico y en este caso, la ficción tiene gran peso. Lo importante es que la serie no inventa ni añade de más. Los hechos son los que son, y las vidas privadas se inventan, pero tampoco se convierten en una epopeya fantástica. Ahora que, si eres amante de la historia, tampoco saldrás con muchos más conocimientos que una visión general de la vida de estos personajes y su intento de conquista. Como entretenimiento y para conocer nuevos datos, no está mal.
Y hay que destacar que, por muy fácil que tenían el intento de ensalzar a los conquistadores españoles, no lo hicieron. Estando en el siglo XXI ya no pega eso de mostrar la gloria de España frente a los monstruos indígenas, no. La serie critica las salvajadas cometidas contra los pueblos nativos en Chile, pero sin darle la espalda a los protagonistas de esta serie.
También mencionar los decorados, escenarios y vestuario. Sin duda las productoras se han esforzado en la veracidad completa de esta historia, que durando únicamente 8 capítulos consigue contar un hecho de relevancia para ambas partes protagonistas.



Pero no existe la serie perfecta.
‘Inés del alma mía’ se lleva un notable, y si no llega al sobresaliente es por varios motivos. En primer lugar, la velocidad. Es obvio que no puede durar los cientos de páginas de la novela, y que la serie está adaptada al formato televisivo, pero da la sensación de que muchas escenas pasan porque sí. Es decir, ocurre el hecho y rápidamente pasa a otro sin explicación y camino a penas.
En segundo lugar y no creo que sea una sensación únicamente personal… ¿Realmente es necesario mostrar intentos de violaciones tan constantemente? Las series que intentan transportarnos al pasado pecan mucho de este hecho, mostrar el abuso de un hombre sobre una mujer, en este caso nativa, por ser superior ya cansa. Es algo que sabemos que se hacía, y rompe mucho el ambiente.
Y en tercer lugar esta crítica va más bien para la selección de casting y esa obsesión con encasillar a Enrique Arce en el mismo papel de siempre. Es un buen actor, muy expresivo, pero en ocasiones cuando él aparecía en la pantalla parecía que estaba viendo ‘La Casa de Papel’. Misma actitud, misma personalidad, pero diferente época.
En general, una buena historia para la televisión española
En resumen, es una serie que pega y mucho en la televisión española. Tiene sus pros y sus contras pero los pros consiguen anteponerse y convertir la producción de RTVE, Boomerang TV y Chilevisión en un muy buen entretenimiento para los amantes de este género televisivo.


