

Con el buen rollo y siendo la personificación de la fiesta, nuestra querida Sofía Ellar nos hizo enloquecer como lleva ya tiempo incalculable haciéndolo.
Guitarra en mano y estableciendo un aura de positivismo acompañada de sus gatos, «Nota en do» fue la encargada de abrir la velada.
Con una declaración de amor de lo más graciosa hacia su pareja Álvaro Soler se acercaron las fronteras de España y Kenia (lugar en el que él se encuentra) con «Verano con lima».
Creo que Sofía es de esas artistas que no dejarán de sorprenderme y emocionarme, ya sea en un Wizink Center repleto o a través de una pantalla y estando en pijama. Brutal la versión del reconocido «Te amo» en un francés conquistador.
Tras desmelenarse, coger las palomitas y brindar por volver a cantarla con Dani Fernández, «Rock and rolles de chiquillos» llegó como himno al que el tiempo no le pasa factura.
Puso la luz a la lluviosa noche con «Bañarnos en vaqueros» y el silencio se hizo en mi salón para escuchar la reversionada «Humanidad en paro», que ojalá tenga vida después de este directo.
Pino puente y despidió el directo.
¡Qué ratitos tan ricos nos hace pasar siempre Sofía!