Ay la música… Yo creo que ha sido de lo poco salvable de este 2020. Para mí, ha sido uno de los años que más me ha costado hacer este ya clásico top 5, puesto que grandes nombres han publicado álbum alegrándonos la existencia, desde Dani Martín, Pablo Alborán o Vanesa Martín.
Me voy a dejar llevar por la irracionalidad del latido del corazón para realizar este artículo. Tú, lector que esperas atento a que se encuentre uno de tus artistas favoritos en este top, estás más que invitado a dejarme en la sección de comentarios tu lista particular.
Recalco antes de tirarme a la piscina, que este top no está en orden.
Rozalén – “El árbol y el bosque”
Si el pasado disco de la albaceteña, era una partida desde el interior de la cantante hasta el resto del planeta con historias de raíces fuertes y arraigadas, este disco es un homenaje al amor propio, una celebración de la propia existencia. Canciones escritas con tinta mojada en verdad con enseñanzas para aplicar en el cuidado de nuestra propia alma.
La Oreja de Van Gogh – “Un susurro en la tormenta”
Los tres años de espera para la publicación del nuevo disco del grupo vasco han merecido la pena. Es un disco de cabecera, que lejos de estar representados por el ambiente oscuro de su portada, dan vida y luz. Recogen testimonios de vida. Es un disco del que da respeto hablar, pues considero que, con solo escucharlo una vez, tu esencia se queda pegada al cuerpo como la mejor de las brillantinas. “Sirenas”, mi debilidad, un testimonio de dolor que cala en una nueva generación que no vivió su historia, la pureza del perdón me tiene completamente absorbida.
Edurne – “Catarsis”
Querida “Catarsis”, cada vez que te veo en lo alto de la estantería y decido escogerte para alegrarme los oídos me pregunto como a estas alturas del año sigues aguantando sin rallarte con mis continuas reproducciones. Siempre tan fuerte, siempre tan dulce, siempre tan amor, siempre tan clara. Sorpresa que me reencuentra con uno de mis pilares musicales. El renacimiento de Edurne.
Miriam Rodríguez – “La dirección de tu suerte”.
Miriam es la juventud que sabe a veteranía. Esa persona que cuando coge una guitarra silencia a cualquiera, y hace que se deseé quedarse a vivir en su voz. Ella es carne de directo, y este disco así a sido. Muy completo, acaparando la balada y las canciones que hacen despegar los pies del suelo. Valiente como pocas sacándolo en mitad del caos. Un cojín al que abrazar y no soltar.
Pablo López – “Unikornio: once mil historias después de ti”
Narra el ascenso a un monte llamado “vida” partiendo desde las profundidades, para llegar a un alma fluorescente. El global del disco sobrepasa el excelente, con una producción absolutamente épica.