La película de Barbie es el fenómeno social del año. Miles de personas han pasado por las salas de cine durante este fin de semana dispuestos a dejarse llevar por la esencia de la muñeca más famosa del mundo. Pero, no solo eso, sino que también se han mimetizado con la película, sacando sus mejores prendas de color rosa para visitar la gran pantalla. Por supuesto, nosotras también hemos caído a los pies de la película protagonizada por Margot Robbie y Ryan Gosling.
¿De qué trata esta película? La trama parte de “Barbieland” donde la “Barbie Estereotípica” empieza a experimentar una serie de defectos. Para solucionarnos, Barbie acompañada por Ken tendrá que viajar hasta el mundo real donde descubrirá el poco idílico funcionamiento de la sociedad.
En primer lugar, hay que destacar que por mucho que se haya catalogado a la película como “familiar” no está hecha para todas las edades. Por lo tanto, para que los pequeños de la familia puedan disfrutar al máximo de la trama, es necesario que tengan un mínimo de conciencia social. Además, hay que destacar que los puntos humorísticos de la película están enfocados hacia un público adulto gracias al uso de dobles sentidos o a las referencias a problemas de la madurez como son la ansiedad, la depresión o el toc.
Por otro lado, como no podía ser de otra forma, la estética de la película es un auténtico diez. Con el uso del color rosa, han conseguido recrear el idílico mundo de las Barbies donde parece que el plástico reina en cada rincón. Además, gracias a los efectos especiales, el trabajo del equipo de maquillaje y la actuación de los protagonistas, es más que creíble que tenemos en la gran pantalla a los mismísimos Ken y Barbie.
Y por último, aunque no por ello menos importante, esta película es una auténtica obra maestra gracias a la defensa y el homenaje a la mujer actual en todo su ser. En primer lugar, se defiende y se retrata el hecho de que el género femenino pueda tener miedos e inseguridades que en gran medida están influenciados por lo que la sociedad pide de nosotras: un buen cuerpo y la felicidad innata. Además, también se parodia el patriarcado y la falta de mujeres en los puestos de poder.
Todos estos conceptos están perfectamente convertidos en hechos durante el transcurso de la trama. Es decir, la película nos muestra como la filosofía debe integrarse en la sociedad y por lo tanto, no nos enseña un final digno de cuento de hadas, sino que entorno a él, se han tomado decisiones de guion dignas de mujeres del siglo XXI.