Que manera la suya de hacer magia, de darle el sentido poético a las palabras. Así comenzó el especial navideño de Vanesa Martín, con un puzle ideal de versos que encajaron a la perfección. Unas palabras que me llenaron de vida los pulmones. La antesala a un concierto único.
El telón se abrió de par en par y con él el corazón de Vanesa. Entró a nuestras casas al desnudo, acompañada de su guitarra y la mejor carta de presentación: «Todas las mujeres que habitan en mi». Tras varios versos, se produjo una vuelta de tuerca con la llegada de la banda, eliminando la frontera que supone la televisión y trasladándonos a la primera línea del directo.



«Despedida y cierre», a continuación, fue protagonizada junto a Manuel Carrasco. El viento del sur revolucionó el tema. La fuerza de la percusión dota esta canción de una fuerza increíble.
Todo esto sirvió de carrerilla para el despegue que supuso (una vez más): «…Y vuelo».
Tras el single de este último disco, Rosario Flores pisó el escenario, mientras que Vanesa demostró su maestría al piano. Tras abrazarnos con la realidad en «La vida es», nos resquebrajaron el corazón con «No te pude retener».
Dos pesos pesados no dejaron escapar la ocasión de acompañar a la malagueña. Por un lado Raphael, con «Cada septiembre» y por otro Sabina con uno de los tantos himnos que ha salido de su pluma como es » A la sombra de un león». Una maravilla ver las miradas recíprocas de admiración.
¿Qué es para vosotros una canción imprescindible? Para mi, es aquella que me acompaña en la cotidianeidad que supone por ejemplo el metro y en las profundidades de mi cerebro. De Vanesa, tengo muchos temas imprescindibles tatuados, pero, si hay una que cumple con los requisitos para romperme el corazón es «Polvo de las mariposas».
También hay artistas que le dan sentido a la música y me hacen seguir amando la creada en español. Ejemplo de ello son India Martínez y Pastora Soler.



Con la primera, compartió «90 minutos» para desembocar en «Arráncame» junto a la todopoderosa Pastora Soler. Un derroche de fuerza y desgarro femenino que voló pelucas.
Junto a la sevillana, consiguió dejarnos sin aliento con una canción de lucha como es «Salto mortal» ¡Qué manera de revolver sentimientos! ¡Qué manera de traspasar la piel! Terapéutico escucharlas.



Los siguientes dos duetos, fueron toda una sorpresa. En primer lugar, compartió «Llega el momento» junto a Lola Índigo. Lápiz para dibujarnos una sonrisa y batidora de potencia y energía ¡Buenísima conexión la de las andaluzas! Tras ella, llegó Yatra, con el cual tuvo un empaste de voces muy interesante.



«Hablaran de ti y de mi», fue la traca de fin de fiesta. La mejor forma posible para dejar al espectador en pleno vuelo, asimilando la fantasía de concierto que nos ofreció. Además, quiero añadir en este artículo mi más sincera enhorabuena a la banda de la cantante, que llenó la gala de elegancia.
Vanesa, gracias por soltar al aire tus canciones en mitad de este caos llamado 2020. Eres luz, inspiración y musa.